Las habitaciones estaban muy limpias y el menú del día, especialmente la tortilla, fue sobresaliente. Sin embargo, nos encontramos con problemas de ruido en la habitación y tuvimos frío debido a un radiador apagado. Aunque la comida fue buena en general, sentí que la experiencia no fue tan buena como en ocasiones anteriores.

Las habitaciones son sencillas pero limpias, además, admiten perros y la comida es muy buena.

me sentí muy afortunado de haber encontrado este lugar, no tengo ninguna queja

Las habitaciones son sencillas, pero muy limpias y con calefacción, lo que se agradece en las noches frías. La comida es deliciosa, especialmente el menú del día, y el bar abre a las 06:00, perfecto para un buen comienzo.

Ruido exterior.

Estancia acogedora y comida excelente

Disfruté de una estancia cómoda con habitaciones limpias y una atención al cliente excepcional. La comida fue uno de los puntos fuertes, especialmente el menú del día que estaba delicioso. La única mejora que sugeriría sería tener camas un poco más anchas para mayor comodidad.

Habitaciones limpias y el personal muy amable. se admite a los perritos, así que todo perfecto para mis compañeros peludos. Buen acceso a WiFi y parking gratuito, ¡cosa que siempre se agradece!

La cama era tan estrecha que pensé que estaba compartiéndola con un espagueti gigante.

Las habitaciones son sencillas, pero muy limpias. La cama es un poco estrecha y la almohada finita, aunque nos trajeron otra sin problema. El desayuno estaba completo y el personal muy amable, especialmente por esperar hasta tarde cuando llegamos después de trabajar. La atención fue bastante buena en general.

Las habitaciones son sencillas pero muy limpias. El menú del día, especialmente la tortilla, estaba increíble. Sin duda volvería a quedarme aquí.

el desayuno es completo pero nos faltaron toallas del tamaño adecuado.

El ruido en la habitación fue una lata, parecía haber un constante zumbido de máquinas que arruinaba el descanso. Además, el radiador estaba apagado, lo que significó un frío considerable en la noche. el olor a tabaco de otras habitaciones también fue muy fuerte, afectando a la ropa que llevamos. La cena y el desayuno no estuvieron a la altura, como en visitas pasadas, lo que dejó una sensación de decepción.

La cena fue una explosión de sabores, especialmente la tortilla, que me hizo querer pedir otra. Las habitaciones, aunque sencillas, estaban limpias y eso es primordial. Además, ¡admiten perros! A mi peludo compañero le encantó.

El frío en la habitación fue un fastidio, ya que el radiador estaba apagado, y la cama un poco estrecha. Sin embargo, el personal fue tan amable que lograron que nos sintiéramos a gusto a pesar de estos detalles.

La comida fue buena, pero molesta el ruido del vecindario.

genial lugar para relajarse y disfrutar

ubicación conveniente, limpieza impecable

ruido excesivo